Josué Canales, de ser un bala perdida, un rebelde y un desastre, a convertirse en una gran promesa del atletismo español
Josué Canales es una de las nuevas sensaciones del atletismo español. Nacido en Distrito Central (Honduras) y formado y criado en Girona como un catalán más desde que tenía tres años, a los 23 Canales mostró todo su potencial al firmar un bronce en el 800 del Mundial ‘indoor’ de China con una marca de 1:45.03, la segunda mejor marca española de todos los tiempos por detrás del récord que él mismo posee (1:44.65). Una presea que venía a recompensar en cierta forma toda una vida dedicada al atletismo, de un niño que tuvo una infancia desestructurada, en la que pudo caer al lado oscuro, pero que gracias al atletismo pudo encontrar una salida, una vía de escape para formarse como persona y no caer en el cajón de los olvidos.