La mujer que quiere acabar con un récord del pasado siglo
La longitud femenina es una de las disciplinas atléticas que no superan la prueba del tiempo. Las 12 mejores marcas de la historia fueron conseguidas el pasado siglo y para encontrar el mejor salto de la última década hay que desplazarse hasta el puesto 39 del ranking de todos los tiempos, cuando la americana Britney Reese saltó, en 2016, 7,31 metros. El récord mundial es un santo grial inaccesible desde 1988, cuando la soviética -sí, seguía viva la URSS- Galina Chistyakova saltó 7,52 metros.