Los 70 años de hierro de Eduardo Vieira
Eduardo Vieira cruza la meta en Cascais y detiene su cronómetro. Congela ese instante y se recrea en su significado, aunque el tiempo prosiga su galope. El empresario vigués no pretende la eternidad. Sí que cada segundo cuente, dotándolos de devoción. «Necesito el trabajo y el deporte. No entiendo una cosa sin la otra», filosofa. Activo en los negocios a sus 70 años, acomete con igual fervor los retos del cuerpo. En la señorial ciudad lusa ha logrado la clasificación en su categoría de edad para el Mundial de Ironman 70.3 del año que viene. «Esperemos llegar dignamente», sonríe.